DOT. INICIATIVAS TERRITORIALES PARA EL BIENESTAR Y LA RENOVACIÓN.
Los equipamientos en la Perspectiva Territorial.
1. Retos en materia de equipamientos.
La configuración de los equipamientos debe hacer frente a la necesidad de lograr un nivel infraestructural lo suficientemente flexible y dinámico como para estar en disposición de responder a los continuos cambios que se producen a nivel social. El concepto de equipamiento es algo básicamente estático; una vez que se define y erige debe responder a aquellas expectativas para las que fue creado. Sin embargo, las necesidades sociales van variando en función de la evolución de la propia sociedad, la cual se encuentra en continuo cambio. Por tanto, lograr que los equipamientos de los que un país se dote estén en continua adecuación respecto al discurrir de los hechos y parámetros que van marcando las pautas del comportamiento social es sin duda uno de los mayores retos.
Esta flexibilidad a la que se alude debe estar claramente presente en la planificación de los equipamientos. Entre los diversos hechos que determinan el equipamiento, el de las características de la población a la que sirven es fundamental. El desarrollo demográfico en cuanto al volumen de población es un hecho determinante, ya que la configuración del servicio a prestar es distinto según se trate de un tamaño de población u otro. Por otra parte, además de la cantidad de población, es también determinante las características de la misma. No es lo mismo una población en la que predominan los elementos jóvenes que aquella en la que son las personas de edad avanzada las que toman protagonismo, que es el camino que parece haber tomado nuestra sociedad. Por tanto los factores demográficos deben ser tenidos en cuenta desde una perspectiva evolutiva.
En este mismo sentido, la distribución de la población en el espacio que pretende cubrirse y los posibles factores de incidencia en este aspecto deben tomarse en consideración. En principio, no parece que la tendencia predominante sea la de agruparse en torno a los núcleos urbanos ya consolidados, sino la de buscar unos niveles de calidad de vida en los que el contacto con la naturaleza adquiere un valor relevante, lo cual dificulta el cumplimiento de accesibilidad o cercanía del equipamiento, dado que parece que va a aumentar la diseminación de la población. Otro factor que va a incidir a largo plazo es el de la aplicación y extensión de la telemática a los distintos ámbitos de la vida. Tal y como se ha comentado ya al hablar del transporte, tal vez el proceso sea algo más lento de lo que desde algunos ámbitos se anuncia, puesto que, como se indica al hablar de la telemática, estas tecnologías precisan de un periodo de asentamiento y de preparación y adecuación de la propia organización social. Sin embargo, el hecho de tener capacidad de acceder a determinados servicios sin necesidad de la presencia física mediante la teleasistencia, televisión por cable, telecompra, telebanco, telemedicina, teleducación, incidirá sin duda en los equipamientos, bien sea en sus capacidades de acogida de usuarios o en sus características de edificación y dotaciones. Por ejemplo, habrá casos en los que no sea necesario dotar a ciertas áreas de determinados centros formativos, ya que la formación se podrá realizar por medios telemáticos, algo que en cierta medida ya se realiza en algunos paises a través de la televisión por cable, en donde personas de distintos puntos del país acceden a cursos específicos a través de este medio. El desarrollo de estas técnicas incidirá sin duda en el tamaño y características de los futuros equipamientos.
2. Referencias para la ordenación de equipamientos.
Con carácter general, se establece que la ordenación de equipamientos de ámbito Nacional o Comarcal con incidencia territorial por parte de los Departamentos del Gobierno Vasco y de los Territorios Históricos tendrán carácter de Plan Territorial Sectorial, a tenor de lo establecido en el artículo 16 de la Ley 4/1990 de 31 de Mayo de Ordenación del Territorio del País Vasco.
Las determinaciones relativas a equipamientos pretenden orientar la política sectorial en función del modelo territorial propuesto en estas DOT. En el caso de que las exigencias de carácter estrictamente sectorial pueden hacer que no sea recomendable la aplicación de las determinaciones sobre equipamientos aquí establecidas, los Planes Territoriales Sectoriales deberán hacer referencia explícitamente a los desajustes que se producen y justificar razonadamente la no procedencia de su aplicación.
Es importante que exista una profunda interrelación entre los diferentes elementos del sistema de equipamientos de la CAPV, dado que en conjunto tienen una gran incidencia en la funcionalidad del territorio y en la configuración de un determinado modelo territorial. Las DOT ofrecen una oportunidad irrepetible en la CAPV para reflexionar de forma coordinada sobre las implicaciones territoriales de cada equipamiento, sobre la interrelación entre ellos y sobre la correspondencia de éstos con la distribución espacial de la población, con las infraestructuras y con otros planes territoriales y sectoriales.
El punto principal de referencia que debe inspirar las propuestas de ordenación territorial de los equipamientos es el "Modelo" planteado en estas DOT que permiten disponer de un marco territorial de referencia común para racionalizar de forma integrada estos aspectos.
Los Planes Territoriales Sectoriales que se redacten para la ordenación de los equipamientos, con carácter general deberían considerar los siguientes aspectos:
Identificarán la escala territorial más adecuada para cada tipo de equipamiento, estableciendo una relación satisfactoria entre el carácter de los mismos, el rango urbano de los lugares elegidos para su localización y el área de influencia territorial y demográfica correspondiente.
Considerarán como referencia orientativa tres escalas operativas para la ordenación territorial de los mismos: Escala Nacional, Escala de Territorio Histórico y Escala de Area Funcional o comarcal. Estas escalas no guardan relación necesariamente con el número, tamaño y sofisticación de los equipamientos, sino con el significado de los mismos en relación con su vocación supramunicipal.
Los Equipamientos de rango nacional se asignarán prioritariamente al Sistema Polinuclear Vasco de Capitales.
Los Equipamientos que puedan considerarse de rango nacional deberían distribuirse en el territorio atendiendo a criterios de complementariedad en función de una estrategia de reequilibrio. La complementariedad se facilitará a través de las importantes operaciones de infraestructura entre las tres capitales vascas propuestas en estas DOT. El objetivo de reequilibrio en las condiciones territoriales de la Comunidad Autónoma y los objetivos globales de interrelación que se persiguen constituyen una situación específica de Euskadi que hace recomendable la ordenación de los diferentes elementos del sistema de equipamiento de rango nacional desde una visión integrada y complementaria entre los referidos ámbitos urbanos.
Los Planes Territoriales Sectoriales para la ordenación de los equipamientos deberían orientarse hacia la potenciación de una red de ciudades de tamaño medio como estrategia para ofrecer servicios, equipamientos y dotaciones a la población que vive en las zonas más alejadas de los principales centros urbanos de la CAPV. Debe propiciarse la integración de los sistemas dotacionales de rango comarcal en las cabeceras y subcabeceras de las Areas Funcionales del Territorio señaladas en el mapa al que hace referencia el pie de página.
Teniendo en cuenta la evolución previsible de la estructura demográfica de Euskadi y los equipamientos ya construidos, con carácter general se considera que la planificación y desarrollo del equipamiento sanitario y educativo debe apoyarse prioritariamente en la reutilización del equipamiento existente más que en la propuesta de nuevas dotaciones.
El equipamiento de rango nacional en el Bilbao Metropolitano se localizará preferentemente en las márgenes de la Ría aprovechando, en la medida de lo posible, espacios vacantes que se generen como consecuencia del desarrollo de las estrategias de renovación urbana. Se intentará, además, propiciar la integración física y social de las márgenes de la Ría, de modo que sea posible un mayor intercambio y relación entre la población de estas dos zonas tradicionalmente segregadas.
La propuesta de localización específica de equipamientos que hayan sido definidos en los Planes territoriales Sectoriales correspondientes debería ser abordada por los correspondientes Planes Territoriales Parciales o por el planeamiento municipal.
En general, se asume el criterio de que cada Area Funcional debe ser autosuficiente para los primeros niveles de la enseñanza, debiendo su población acudir a las ciudades más importantes para la formación universitaria.
La política educativa y el planeamiento municipal y supramunicipal procurarán integrar la red de centros docentes con los equipamientos culturales, bibliotecas, centros culturales, etc., y los espacios deportivos tales como polideportivos, pistas de atletismo, etc.
Con respecto a la búsqueda de la deseable escala territorial más adecuada para cada tipo de enseñanza, se considera que la Educación Infantil (3 a 6 años) y la Educación Primaria (6 a 12 años) son de ámbito preferentemente local y que la Educación Secundaria, tanto Obligatoria (12 a 16 años) como Postobligatoria (16 a 18 años) son de rango comarcal o subcomarcal, según la población y la extensión de las Areas Funcionales. Por último, el primer y segundo ciclo de la enseñanza universitaria y las enseñanzas de postgrado deben buscar fórmulas para su desarrollo en Campus integrados entre si y bien relacionados con las áreas urbanas.
El desarrollo de las labores de formación e investigación en los centros universitarios de la Comunidad Autónoma se considera una actividad estratégica en la actual situación histórica de Euskadi. Es importante buscar la máxima integración entre universidad y sociedad y particularmente una estrecha colaboración entre las empresas y los departamentos universitarios con objeto de hacer viable una eficaz reconversión económica y transformación social.
En estas Directrices se asumen tanto la filosofía como las principales determinaciones de la planificación sanitaria de la Comunidad Autónoma Vasca. Asimismo, se ha partido de las ideas básicas respecto al modelo sanitario a desarrollar (Descentralización, Planificación, Universalidad, Integración y la Complementariedad que proporcionen los Sistemas Privados).
Con respecto a la correspondencia con la delimitación de Areas Funcionales, en general, se considera que cada Area Funcional debe ser autosuficiente en los niveles de asistencia sanitaria externa (Consultorio, Centro de Salud, Ambulatorio).
En cuanto a la escala territorial de los servicios, se considera que la Casa de Médico debe ser de ámbito local; los Consultorios y Centros de Salud tienen carácter municipal y a veces supramunicipal; los Ambulatorios ejercen un ámbito territorial de influencia comarcal en cuanto a la asistencia especializada; los denominados Hospitales Generales dan servicio a un Area Funcional o a un conjunto de ellas; y por último, el Hospital General Base o de Referencia es de carácter nacional.
Desde el punto de vista de la Comunidad Autónoma el objetivo debería ser abogar por una demarcación judicial que permita lograr el máximo equilibrio posible en cuanto a población servida por los distintos Partidos Judiciales e intentar equilibrar la extensión superficial de los mismos con objeto de acercar los órganos de Administración de Justicia a la población y obtener así la máxima racionalidad y eficacia en la organización territorial de estos servicios, respetando el carácter de la delimitación de las Areas Funcionales y correspondencia con otras estrategias sectoriales de infraestructuras, dotaciones y equipamientos con objeto de lograr la deseable integración y articulación funcional de las diferentes áreas del territorio de la Comunidad Autónoma Vasca. En particular, es importante coordinar la delimitación de los partidos judiciales con la localización de servicios vinculados tales como registros y notarías.
La inversión en equipamiento cultural y de ocio en la Comunidad Autónoma Vasca puede considerarse de carácter estratégico en el cambio de Modelo Territorial, y por ello debe hacerse un esfuerzo especial por parte de la política sectorial correspondiente. El planeamiento de desarrollo de las DOT deberá dotar de un carácter emblemático a los edificios y lugares destinados a las actividades de difusión cultural, ocio y "producción" de cultura.
Los Planes que desarrollen las diversas instituciones de la Comunidad Autónoma con competencias en materia de equipamientos culturales y de ocio deberían asumir el principio de interrelación y de oferta global para el conjunto de Euskadi, teniendo en cuenta la reducida extensión territorial, la alta densidad demográfica y las estrategias de interconexión infraestructural que se acometen desde las DOT.
El sistema dotacional de equipamiento cultural debería estar coordinado especialmente con la organización territorial del equipamiento educativo propuesto en estas Directrices, sobre todo en sus escalones inferiores de ámbito local y comarcal, donde aparece orientado más hacia lo cultural en su vertiente formativa. De esta forma, los municipios que más alumnos reciben para escolarizar, deben disponer de unas dotaciones culturales de apoyo adecuadamente dimensionadas a tales efectos.
En el sistema de equipamiento cultural, sobre todo en el rango comarcal, debe tenderse a la polivalencia y multifuncionalidad dejando la especialización para los escalones más sofisticados de ámbito territorial y nacional.
En la ordenación de los equipamientos deportivos debería tenerse en cuenta la corrección de los desequilibrios actuales a través de acciones selectivas. En el ámbito comarcal debería permitirse el desarrollo del deporte de competición, ofreciendo posibilidades que en el ámbito local serían inviables para la gran mayoría de los municipios de la CAPV.
El País Vasco en su conjunto debe realizar un esfuerzo para mejorar sus instalaciones para el deporte de élite y deporte espectáculo. También debe incrementar sustancialmente su nivel de equipamientos deportivos sofisticados relacionados con la actividad turística y con las posibilidades de terciarización de su base económica. Globalmente, estos equipamientos constituyen un factor de atracción del conjunto de la Comunidad Autónoma.