El tema que voy a desarrollar es el relacionado con la danza vasca tradicional. Partiendo de la realidad actual de la danza, me gustaría explicar cuáles son las necesidades que presenta en sus diversas prácticas y sus principales retos cara al futuro. Este es un pequeño resumen de la presentación del I. Congreso Internacional de Políticas Culturales: Principales retos de futuro de la danza tradicional vasca: 1-EDUCACIÓN Creo que la danza tradicional tiene una necesidad muy apremiante en este sentido. Es preciso asegurar cuanto antes un sistema educativo que garantice el futuro de la danza tradicional vasca. La danza tradicional no posee un espacio de aprendizaje ni profesores especializados y eso coloca su futuro pendiente de un finísimo hilo. Espacios de aprendizaje: Es posible introducir el aprendizaje de la danza tradicional dentro de las Escuelas de Música. Ahí están los ejemplos de Rentería, Vitoria y Bilbao, entre otros. Es uno de los campos que hay que desarrollar. Habría que conocer la realidad de cada sitio y actuar en consecuencia. Necesidad de profesores: La escasez de maestros de danza es otra necesidad acuciante. Para poner en marcha escuelas es necesario que existan profesores especializados y para crear los bailarines del fututo son imprescindibles maestros adecuadamente preparados. Es otra gran carencia de la enseñanza. Es preciso educar a profesores de danza que ejerzan de orientadores en esas escuelas que surjan. La danza en la educación ordinaria: Además de la propia enseñanza de la danza, creo que ésta debe disponer también de su espacio dentro del sistema educativo ordinario. Es decir, hay que ofrecer la posibilidad de practicar la danza incluso a las personas que no quieren dedicarse a la misma de modo profesional. Antiguamente la gente aprendía en la calle o en casa los bailes tradicionales, de esa manera se ha realizado la transmisión de generación en generación. Hoy en día, en cambio, esa transmisión se ha interrumpido. Del mismo modo que se enseñan canciones populares y versos antiguos, considero que en las escuelas debe existir un lugar para los bailes populares.
Otra gran carencia de las danza vasca es el tratamiento de la documentación. Sobre este tema, en general, hay un lío tremendo. Mucha documentación se encuentra recogida en formato antiguo, otra parte está en manos privadas, falta abundante documentación sobre la danza... Todo está muy disperso y no es fácilmente accesible. Debemos dar una solución adecuada a este problema, ya que la documentación sobre la danza es imprescindible para todos los que están trabajando en ese tema. Por tanto, lo mismo que ocurre en música con ESERBIL, sería conveniente la creación de un Archivo de la Danza Vasca, o bien crear una rama sobre danza en el actual archivo ERESBIL. Ese espacio debería servir de punto de concentración de toda la documentación existente, de coordinación para la nueva documentación que se cree y de lugar de consulta para los usuarios
Existen numerosos factores muy necesarios para la producción y creación de espectáculos y ellos también necesitan de un buen meneo: Formación: Los bailarines que se dedican a labores de creación necesitan formación. Es necesario traer aquí de modo regular a profesores de fuera, coreógrafos, experiencias... así como enviar fuera también a nuestros creadores y coreógrafos. Conocer la experiencias del exterior, establecer contactos... Los coreógrafos y creadores de Euskal Herria necesitan un intercambio de experiencias de ida y vuelta. Y más aun los que provienen de la danza tradicional. En efecto, los que se dedican a la danza contemporánea o clásica han sido más dados a viajar al exterior, pero los creadores de base tradicional casi no han salido. Ayudas económicas: Las ayudas que otorgan las instituciones públicas para la producción de espectáculos de danza son muy escasas, y las instituciones privadas ni siquiera participan en esas iniciativas. Considero necesaria la creación de fundaciones que recojan dinero privado. El modelo que se utiliza en deporte me parece aplicable a la cultura y, en este caso, a la danza, así como también es necesario un aumento del dinero público. Exportación: De entre todas las compañías que se dedican hoy en día en Euskal Herria a la danza, las que más actúan son las dos que trabajan la base tradicional. A diferencia de otros estilos de baile, han conseguido afianzarse en el terreno de las artes escénicas de Euskal Herria. Sin embargo, traspasar nuestras fronteras al exterior ya es casi imposible. Se deberían trabajar las relaciones cara al exterior con festivales de danza, con ferias, con Gobiernos... No es suficiente subvencionar las giras. Esas ayudas para las giras deben complementarse con otros trabajos previos. Profesionalización: En general, todos los problemas que estamos mencionando aquí tienen una base común. De todas las personas que se dedican a la danza en Euskal Herria, nadie es profesional. En las compañías existe algún profesional, pero la mayoría de los integrantes de las compañías son amateurs. Y, claro, eso condiciona en gran medida el nivel de la danza vasca. Si las compañías dispusiesen de estructuras y bailarines profesionales, la situación sería muy diferente. A una compañía no profesional no se le puede exigir un nivel y una difusión profesionales. Por eso, en vez de empezar a tomar medidas provisionales, deberíamos plantearnos la cuestión y decidir si queremos compañías profesionales o no. Si la respuesta es afirmativa, deberemos comenzar por pensar y tomar las medidas adecuadas para que eso suceda. Ahí tenemos un gran reto cara al futuro. Las medidas que aquí se proponen son sumamente básicas, esto es el resumen de una presentación de 12 minutos. Sin duda alguna, es necesario concretar más el tema y tomar en consideración muchos más detalles; además, algunos aspectos se han quedado en el tintero. A ver si tenemos la oportunidad de referirnos a ellos.
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Fecha de la última modificación: 29/11/2005 |